Dia del Marketing y Publicidad.

15.02.2013 21:40

Había desarrolado una pequeña aversión al día en el que los novios se demostraban, con bombos y trombones, lo mucho que se amaban. No le encontraba sentido a la cursilería excesiva; alguna vez había tenido la idea de entregarle a mis amigos más cercanos algún presente...pero había desistido demasiado rápido de aquella idea, no creía que un día en el calendario debiera usarse para recompensar a aquellos con los que no hablas en todo el año.

Hasta no acercarse la fecha no notaba la extraña indiferencia, ya que, por conocerme bien, me gustaban algunos detalle de vez en cuando. Mis amigos suponían, por mi excesivo románticismo, que el dia me embargaría de miles de emociones positivas, que escribiría tantos poemas como palabras tenía el diccionario o que incluso, usaría cualquier rostro bonito para describirlo maravillosamente. Parecía todo lo contrario, la único que había escrito en todo el día era un examen de Morfo, no estaba tan difícil, pero si me había dado suficiente como para pensar a fondo cada respuesta. Tan perdida estaba en cuanto al hilo de los acontecimiento que había preguntado dos veces qué fecha era, mis compañeros, con un tono que denotaba obviedad, había dicho al unísono ''14 de Febrero'', me sentí una ignorante.

Terminé el examen de primera, debía dejar de hacerlo o me parecería a un ratón de laboratorio. El ambiente en el Horance tenía un matiz empalagoso, había osos de peluche en todos los tamaños posibles; rosas rojas, blancas, amarillas, del color que se me pudiera ocurrir habían más de dos ramos; chocolates en todos los tamaños y de todas las marcas... Sentía un leve mareo, la cabeza me daba vueltas, ¿acaso nadie demostraba su amor ningún otro dia? Esperaba equivocarme, pero esa era la impresión que daban.

Michael me había dado un caluroso y dulce abrazo junto con poner un pie en el Horance, lo único que me gustaba del dia eran los dulces abrazos que me brindaban unos o dos amigos sinceros. Tenía clase a la misma hora en la que yo estaba libre, mi horario tenía muchas fallas. Me acurruqué en una de las esquinas del pasillos central, estaba diagonal al salón de Michael, que estaba justo al lado del salón de Shal y José, tenía una vista muy apropiada. Saqué de mi bolso ''Noches De Baile En El Infierno'', llevaba años buscando aquel hermoso libro, Stephenie Meyer se había aliado con otras 4 escritoras y habían creado relatos sobrenaturales sobre un tema: Los bailes de fin de curso. Aproveché mi tiempo a solas y me dediqué a escudriñar entre los recuerdos que tenía sobre mi noche de graduación, mi promoción había discutido la idea de organizar una única fiesta en la que todos compartieramos juntos como grupo por última vez, la idea me había gustado al principio...pero había desistido luego de darme cuenta que ninguno de mis amigos iría. Los asistentes serían aquellos con los que no había mantenido una conversación más profunda que un ''¿Me prestas un lápiz?'', la sola idea de que tendría que convivir con ellos el tiempo que durara la fiesta me perturbaba un poco, ¿como se supone que disfrutaría mi última noche con la promoción sino podía pasar a la mayoría de mis ''compañeros''?

El receso llegó, David (el veinteañero) se acercó a mi distrayendome de mi lectura, hacía dias que no lo veía, ¿estaba más bronceado? Se sentó a mi lado tarareando una canción que no conocía, poco después me enteré que era suya, había salido de una noche de insomnio, no era nada mala. Conversamos un rato largo y Michael apareció de la nada, compartía la clase con David pero jamás habían mediado palabra, tal vez yo fuera aquel conector. Y ahi estaba yo, sentada al lado de dos increíbles músicos, leyendo sobre hombres maravillosamente irreales...¿O era que no los había visto aún?

Pasé la tarde en casa de un amiga que adoraba, Mariagni se había ganado mi cariño en las 12 horas que nos había tomado llegar a la capital para el concierto de Nick Jonas en el 2011, de regreso ya eramos más que hermanas. A su casa llegamos: José, Shal, Marial, Laura, Angeline, Karla, Sheila (hermana de Marial) y yo. Mariagni tenía la película que los Jonas habían sacado al mercado unos cuantos años atras, película que ninguno había visto completa. Las lágrimas no se hicieron esperar, un gesto de Kevin me había recordado las palabras de Nick el 11/10/12 ''Ellas nunca se fueron''; Kevin parecía un niño en una dulcería, su cara de fascinación logró desencadenar más de mil emociones distintas en mi cuerpo, quería llorar, quería gritar, quería abrazarlo...Quería demostrarle cuan importante era para todas nosotras, deseaba que olvidara aquel asunto de la ''esquina'' que tenía años atormentandolo.

El dia del marketing y publicidad había sido igual año tras año, deseaba que el cambio de ambiente cambiara tambien las reacciones pero todas eran iguales: La pareja peleaba, no se hablaba y ese dia se regalaban chocolates y globos, colorín colorado, ellos han regresado. Algún dia me acostumbraría a los detalles excesivos, tal vez tener un novio en estas fechas me enseñaría a digerir algunas cosas...Solo el destino lo sabía.

 

Se despide, La Jonatica Universitaria